Acné inflamatorio: Tratamiento con hongos medicinales

El acné es una afección de la piel que la mayoría de las personas experimenta en algún momento de su vida. Esta afección se divide en dos categorías: acné inflamatorio y no inflamatorio. Los pacientes con acné inflamatorio luchan con manchas hinchadas, rojas y a menudo dolorosas, causadas por la obstrucción de los poros.

Aunque el acné se da con mayor frecuencia en los adolescentes, como resultado de los cambios hormonales que se producen durante la pubertad, también puede producirse como resultado del estrés, los cambios en la dieta y la exposición a diversas sustancias, incluidos ciertos medicamentos.

Aunque se trata de una afección común, muchas personas siguen buscando tratamiento para el acné inflamatorio, ya que suele causar problemas de autoestima, molestias y dolor. Por desgracia, el tratamiento del acné suele ser limitado. Los hongos medicinales podrían ser la clave para un tratamiento integral del acné.

Setas medicinales para el acné inflamatorio

Muchos tratamientos para el acné inflamatorio se centran en reducir la inflamación de la piel y eliminar las bacterias peligrosas. Los antibióticos orales pueden ayudar a controlar las bacterias en el caso del acné quístico, pero sólo tienen un efecto temporal. La vitamina A y los retinoides tópicos pueden ayudar a eliminar las células muertas de la piel y a limpiar los poros, pero los problemas subyacentes siguen siendo los mismos.

Los hongos medicinales ofrecen un enfoque global del acné inflamatorio, ya que abordan tanto los desequilibrios internos como los de la piel. Los hongos medicinales han sido un componente de la salud holística durante siglos, pero sólo recientemente estos productos naturales han comenzado a mostrar su potencial para el cuidado de la piel y el tratamiento del acné.

Los compuestos bioactivos de los hongos tienen diversos beneficios para la salud de la piel. Los hongos medicinales son potentes antioxidantes, responsables de combatir la oxidación que puede provocar daños en la piel. Las moléculas de triterpeno, extraídas del hongo Reishi, tienen un efecto antiinflamatorio en la piel, así como un efecto inmunomodulador, que ayuda a reducir el riesgo de infección bacteriana.

Dado que la inflamación es el principal síntoma del acné inflamatorio, el extracto de Reishi podría ser la clave para mantener este problema bajo control.

Además, el hongo Reishi también contiene polisacáridos, un tipo de moléculas de azúcar complejas que actúan sobre la piel para reducir la inflamación y unirse a los radicales libres. Los betaglucanos presentes en varios tipos de hongos, como el Cordyceps, el Reishi y el Shiitake, también ayudan a hidratar la piel como humectantes. Estas moléculas atraen la humedad a la piel y penetran profundamente en las capas de la epidermis para proporcionar una barrera protectora.

Los mejores hongos medicinales para el acné inflamatorio

Actualmente se están investigando diversos hongos medicinales por sus beneficios para la piel. Estas sustancias únicas tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, pero también favorecen la curación de heridas, la hidratación, la nutrición y la luminosidad de la piel. Y lo que es mejor, los hongos medicinales pueden proporcionar una solución de tratamiento interno y externo para el acné.

El hongo shiitake representa uno de los mejores hongos medicinales para el tratamiento interno del acné inflamatorio. El hongo shiitake contiene altas cantidades de ácido kójico, que ayuda a aclarar las áreas de hiperpigmentación, desvanecer las cicatrices y reducir las manchas oscuras.

Tomar estos hongos medicinales también proporciona un aumento de minerales y vitaminas como la vitamina D, vitaminas del complejo B y nutrientes como la L-ergotioneína. Este antioxidante ayuda a la descomposición celular y fomenta un proceso de renovación más rápido para la producción de elastina saludable.

Los hongos medicinales también son una buena fuente de prebióticos, es decir, las sustancias que ayudan a las bacterias buenas a multiplicarse y a desterrar las malas (origen del acné inflamatorio).

Para el apoyo externo, los hongos Reishi y Cordyceps aplicados tópicamente parecen dar los mejores resultados. El hongo Reishi tiene beneficios antiinflamatorios, antioxidantes, antienrojecimiento y antiarrugas. Aplicado de forma tópica, puede ayudar a mejorar la hidratación de la piel y a sentar las bases de las ceramidas, los componentes básicos de la capa protectora de la piel que impide la entrada de sustancias ambientales.

Incluso existen jabones con Ganoderma Lucidum que pueden regenerar la piel dañada y eliminar el exceso de bacterias con un uso regular. Por otro lado, los hongos Cordyceps son también una excelente fuente de antioxidantes y una fantástica herramienta para hidratar la piel. El Cordyceps puede potenciar el colágeno y se ha mostrado prometedor como tratamiento tópico para diversas afecciones inflamatorias como el eczema. Al igual que el Reishi, también tiene efectos inmunomoduladores, y el Cordyceps puede incluso proteger la piel de las fuentes de inflamación.

Tratamiento Inside Out

Los hongos medicinales son un tratamiento completo para el acné inflamatorio, adecuado para reducir la inflamación de la piel, mejorar el equilibrio de la microbiota en el cuerpo y combatir los radicales libres que pueden promover el daño de la piel.

La mezcla adecuada de hongos medicinales puede iluminar y reparar las células de la piel como tratamiento tópico, reduciendo directamente la inflamación y favoreciendo la barrera protectora de la piel. A nivel interno, los hongos medicinales modulan el sistema inmunitario y protegen al organismo de los desequilibrios que podrían provocar un aumento de las bacterias no saludables. Lo que hace que esta opción de tratamiento sea aún más atractiva es que los hongos medicinales son adecuados para la mayoría de las personas, sin apenas efectos secundarios.